El domingo 17 de abril de 2016 se realizó la consagración
del nuevo obispo de Huancayo, Mons. Carlos
Salcedo Ojeda, quien hasta el año pasado se desempeñó como párroco de la
parroquia San Francisco de Asís de Orcotuna, y que se ha convertido en el nuevo
obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Huancayo. Carlos Salcedo es natural de Lima e hijo de
padres acollinos (Jauja).
En una inédita, extensa, emotiva y alegre celebración
litúrgica matizada con estampas folclóricas (danzas típicas de la región),
presidida por Mons. Pedro Barreto Jimeno, arzobispo de Huancayo; por Mons.
Salvador Piñeiro, arzobispo de Ayacucho y Presidente de la Conferencia
Episcopal Peruana, y por Mons. Miguel Cabrejos, arzobispo de Trujillo; cerca de veinte
obispos de diferentes prelaturas, diócesis y arquidiócesis del Perú, entre
ellas Ayacucho, Tarma, Huánuco, Caravelí, Cusco, Ica, Chiclayo, San Ramón,
Chosica y otros acompañaron e impusieron sus manos al nuevo obispo de Huancayo.
También estuvieron presentes vicarios, sacerdotes y diáconos de diferentes lugares
del Perú, y el secretario de la Nunciatura Apostólica de la Santa Sede, Mons.
José Antonio Teixeira.
El coliseo del colegio Salesiano de Huancayo fue el
escenario de esta fiesta de la Iglesia de Huancayo, que reunió a gran cantidad
de fieles de diferentes parroquias incluidas dos de Lima, a a las que
perteneció Mons. Carlos Salcedo. Religiosas, religiosos, seminaristas y laicos
de las cinco vicarías que conforman la arquidiócesis de Huancayo, le dieron el
calor de Iglesia a este evento.
Un álbum de fotos de la consagración del nuevo obispo, en
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